La sorpresa del día 14 ocurrió sin lugar a dudas. El FC Bayern München, que llegaba en primera posición, sufrió una derrota ante un Mainz 05 que se encuentra en la mitad de la clasificación.
Un grupo de jugadores bávaros estuvo ausente durante los primeros 45 minutos.
Tras la contundente victoria sobre Shakhtar, el equipo de Baviera regresaba al terreno de juego con el objetivo de aumentar su ventaja en lo más alto de la clasificación de la Bundesliga. El Mainz se encuentra en la mitad de la clasificación, pero tiene el objetivo de clasificarse para competir en las Copas.
Por otro lado, el favoritismo observado en la primera mitad del juego desapareció por completo. El equipo liderado por Bo Henriksen dominó el juego en la primera mitad y no tuvo problemas en su línea defensiva. En la parte ofensiva, su juego se volvía más incisivo hasta que en el minuto 41, Jae-sung Lee rompió el empate y puso en aprietos al Bayern de cara al segundo tiempo.
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En el segundo tiempo, a pesar de la reacción del Bayern, no fue suficiente para ganar en Mainz.
En la segunda parte del juego, todo siguió igual sin ningún cambio. Kompany no intervino en la alineación y, como era de esperar, Mainz mantuvo el control durante todo el partido. A los 60 minutos, un excelente pase desde el costado derecho permitió a Lee anotar su segundo gol para el equipo local gracias a un desvío.
El equipo bávaro no logró reaccionar ante el duro golpe del baldazo de agua fría, solo hasta el minuto 87 Leroy Sané pudo aprovechar un rebote para marcar el gol de descuento. No obstante, a pesar del esfuerzo final, no lograron alcanzar su objetivo y se llevan un fracaso para tener en consideración.
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