El Clásico del fútbol español está a punto de decidir nuevamente un título de la Copa del Rey después de once años.
El Real Madrid y el FC Barcelona se encontrarán en la final del torneo, tras una pausa de once años desde su último enfrentamiento por el trofeo, recreando la cita de 2014. Con ambos clubes en la cima del fútbol europeo y una rivalidad histórica que continúa en su apogeo, este nuevo duelo se anticipa como un evento de elevada tensión.
Desde la final de 2014 en Mestalla, donde el equipo blanco obtuvo la victoria gracias a un gol memorable de Gareth Bale, los dos clubes han experimentado diferentes etapas de éxito y renovación. Ahora, en el año 2025, los gigantes del fútbol español llegan con plantillas revitalizadas y entrenadores que han implementado estilos de juego claramente definidos, lo que asegura un partido de alto calibre.
La última confrontación entre el Real Madrid y el Barcelona en una final de la Copa del Rey tuvo lugar el 16 de abril de 2014, en el estadio de Mestalla. Se trató de un encuentro intenso, lleno de emoción hasta el último momento, que culminó con la victoria del Madrid por 2-1. Este partido dejó recuerdos memorables, como el gol legendario de Gareth Bale, quien recorrió la banda izquierda en una carrera imparable para finalizar ante José Manuel Pinto.
El Real Madrid y el Barcelona llegaron a la final de 2014 en contextos distintos. Los merengues, bajo la dirección de Carlo Ancelotti, competían en la Liga y estaban en las semifinales de la Champions League, al tiempo que los catalanes, entrenados por Gerardo "Tata" Martino, veían su temporada complicarse tras ser eliminados de competiciones europeas por el Atlético de Madrid y perder terreno en el campeonato nacional.
El equipo blanco se presentó a la final sin su figura más destacada, Cristiano Ronaldo, quien no pudo participar debido a una lesión. No obstante, contaba con jugadores clave como Ángel Di María, Luka Modrić y Karim Benzema. Por parte del Barcelona, Lionel Messi, Neymar y Cesc Fàbregas lideraban el ataque, aunque el equipo no logró exhibir su mejor rendimiento.
El Real Madrid dio el primer golpe en el minuto 11 con un gol de Di María, tras una asistencia de Benzema. Pese al dominio inicial del conjunto blanco, el Barcelona consiguió empatar en la segunda mitad con un cabezazo de Marc Bartra proveniente de un tiro de esquina.
No obstante, el momento decisivo llegó en el minuto 85, cuando Gareth Bale protagonizó una de las jugadas más memorables en la historia de los Clásicos. El galés recibió el balón en su propia mitad, aceleró por el lado izquierdo dejando atrás a Bartra y definió con precisión ante Pinto, asegurando así la victoria del Real Madrid y otorgándole su 19ª Copa del Rey.
La victoria en la Copa representó el primer galardón durante la era de Ancelotti en el Real Madrid y actuó como catalizador para la búsqueda de la deseada "Décima" en la Champions League unas semanas más tarde. Para el Barcelona, la pérdida señaló el cierre del ciclo de Martino y el comienzo de un proceso de renovación que finalizaría con el triplete en la temporada siguiente bajo el mando de Luis Enrique.
Ahora, tras once años, el Real Madrid y el Barcelona se enfrentan nuevamente en una final de copa. Con nuevos actores y diversos escenarios, este enfrentamiento promete agregar otro capítulo brillante a la historia del fútbol español. ¿Existirá una revancha por parte del Barcelona o el Real Madrid reclamará nuevamente la victoria como lo hizo en 2014? La respuesta se conocerá en el próximo Clásico por la Copa del Rey.