Impactante triunfo del Arsenal dirigido por Mikel Arteta contra el Real Madrid en el encuentro de ida de los cuartos de final de la Champions League.
Alineación del Arsenal: Raya, Timber, Saliba, Kiwior, Lewis-Skelly, Declan Rice, Thomas Partey, Odegaard, Martinelli, Saka y Merino.
Alineación del Real Madrid: Courtois, Valverde, Asencio, Rüdiger, Alaba, Modric, Camavinga, Bellingham, Rodrygo, Vinicius y Mbappé.
Desde el inicio, el Arsenal mostró un ímpetu considerable en el dinámico comienzo en el Emirates Stadium. Con el tiempo, el equipo blanco empezó a mejorar y el ritmo del partido se estabilizó. No obstante, esto no impidió que se observara un constante intercambio de ataques.
El exjugador del Madrid, Odegaard, junto a Saka, se estaba convirtiendo rápidamente en una amenaza para el equipo merengue, especialmente para Alaba. Ambos jugadores tendrían una destacada primera mitad, aunque no lograron concretar en el marcador. Así se llegó al intermedio, donde Ancelotti necesitaba motivar a sus jugadores.
Los "gunners" regresarían al segundo tiempo con aún más determinación que en el primero, y una fuerte ofensiva se avecinaba. Alaba realizó una falta innecesaria cerca del área, y Declan Rice cobró el tiro libre de manera excepcional, poniendo a su equipo por delante.
La presión continuaba y el Real Madrid carecía de ideas, y solo unos minutos después, se produciría un momento extraordinario. Otra falta cerca de la medialuna del área de Courtois. Declan Rice y Odegaard se disponían a ejecutar. ¿Qué iba a suceder? Efectivamente, lo inesperado: otro GOLAZO que se dirigía directamente a la escuadra de la portería. Un dato curioso es que el futbolista inglés nunca había anotado un libre directo en su carrera. ¡Qué gran ocasión para debutar, y no solo con uno, sino con dos!
Parece que los hombres de Arteta no estaban dispuestos a conformarse con esta ventaja, por lo que capitalizaron el mal estado anímico del Madrid para infligir aún más daño. Así, llegó el tercer gol con un certero disparo de Mikel Merino que culminó con el esfuerzo del Arsenal en esta noche.
Los blancos no supieron reaccionar y el único jugador del Madrid que se destacó fue Courtois. El portero belga, aunque recibió tres goles, tuvo sus momentos de gloria con paradas espectaculares.
Para finalizar el encuentro de la manera más desafortunada, Camavinga vería la tarjeta roja tras una acción completamente insensata.
Un duro golpe de realidad para el Real Madrid. Aunque aún queda el partido de vuelta en el Bernabéu, la remontada parece prácticamente imposible dadas las circunstancias observadas en Londres.