LaLiga interpuso una apelación en relación con la registración de Dani Olmo y Pau Víctor en el FC Barcelona.
LaLiga ha presentado un recurso contencioso-administrativo y ha pedido medidas provisionales en relación a la decisión del Consejo Superior de Deportes (CSD) del 3 de abril de 2025, que favoreció al FC Barcelona y a sus jugadores Dani Olmo y Pau Víctor, lo que permitió su inscripción en competiciones oficiales tras un rechazo previo fundamentado en el Convenio de Coordinación firmado entre la RFEF y LaLiga el 4 de enero del mismo año.
LaLiga ha llevado a cabo un recurso contencioso-administrativo y ha solicitado la implementación de medidas provisionales contra la resolución del CSD del 3 de abril de 2025, que estima el recurso presentado por el FC Barcelona ante el CSD, que resuelve lo siguiente:
LaLiga sostiene que la resolución no solo concierne a cuestiones estrictamente reglamentarias, sino que también compromete el interés general de la competición. Considera que permitir la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor en su estado actual podría establecer un precedente dañino para la estabilidad financiera de la liga profesional.
En tal contexto, LaLiga ha demandado la suspensión temporal de los efectos de la resolución mientras se examine el fondo del asunto.
“…estimando el recurso presentado por el Sr. Pere Lluís Mellado Bailo, en representación del FC Barcelona y de los jugadores de dicho club, el Sr. Daniel Olmo Carvajal y el Sr. Pau Víctor Delgado, quedando anulado el acuerdo del Convenio de Coordinación RFEF-LaLiga del 4 de enero de 2025, que no concede el visado previo ni la licencia definitiva solicitada por el FC Barcelona para los mencionados jugadores, reconociendo además que estos cuentan con licencia vigente, de acuerdo a lo dispuesto en los fundamentos legales”.
En este sentido, LaLiga considera que la resolución afecta gravemente al marco normativo establecido sobre el control económico y la gestión de licencias deportivas, perjudica el interés general de la competición y pone en riesgo su integridad al violar el principio de igualdad entre los clubes. Esto apoya la necesidad de una respuesta judicial inmediata que, mediante la adopción de las medidas provisionales solicitadas, asegure el equilibrio competitivo y la viabilidad financiera de la competición profesional.
El 23 de abril se señala como la fecha en la cual el juez recibirá el informe y decidirá sobre la aceptación o rechazo de las medidas provisionales. Si decide aceptarlas, las licencias de los dos jugadores quedarían suspendidas, impidiéndoles jugar con el FC Barcelona mientras se analiza en profundidad el recurso presentado por la asociación. Si opta por la negativa, los jugadores podrán continuar participando en los partidos a la espera de que el juez tome una decisión sobre el fondo del asunto.