El Arsenal humilla al Real Madrid. Fin de una era y despedida de Ancelotti sin grandes gestos heroicos.
Kylian Mbappé llegó al Real Madrid con la expectativa de vivir noches memorables, experimentar remontadas y conquistar la Champions. Sin embargo, su primer encuentro inolvidable resultó en un fracaso.
Florentino lo contrató para fortalecer al equipo, pero su incorporación ha contribuido a disminuir el rendimiento de los demás jugadores.
El Real Madrid ya obtenía victorias antes de su llegada. Su inclusión en el equipo solo ha llevado a perder el liderazgo, y además, el Barcelona está en la pelea por la sucesión.
No hubo heroísmo, ni magia, ni levantadas. Este Real Madrid recibió una paliza y fue expulsado de Europa de manera vergonzosa, con un marcador de 3-0 en la ida y 1-2 en la vuelta.
5-1, una goleada, como diría el inolvidable presidente Vicente Boluda. La magia estaba entre los aficionados, eso nunca falla. Pero no se trasladó al terreno de juego.
El Madrid no mostró ningún orden y sus figuras se desvanecieron.
El Real Madrid no tuvo un rendimiento notable. Sus estrellas simplemente no aparecieron. El Arsenal jugó con orden y disciplina.
Los jugadores de Arteta tenían claro lo que querían y cómo conseguirlo. Los de Ancelotti, en cambio, intentaban imponer su individualidad y recurrir a su ingenio personal en busca de una hazaña.
Sin embargo, esta vez no funcionó. No puede resultarse exitoso en todo momento. Mucho menos si el éxito no se persigue con inteligencia.
Buscaban marcar el segundo gol antes de haber conseguido el primero. No había un plan definido. Si Mbappé está torpe, Vinícius inactivo, Rodrygo ausente y Bellingham inexistente, si el Madrid depende de estas individualidades, su suerte está echada.
El Real Madrid no logró encontrar su ritmo en la primera mitad. La energía del público no se transmitió al campo. Allí, los jugadores blancos no alcanzaban ese grado de fervor que pudiera desestabilizar al Arsenal.
Y eso que el encuentro comenzó con un gol anulado al Real Madrid por un claro fuera de juego de Mbappé. El Madrid intentaba atacar, pero sin claridad, mientras que el Arsenal iba creando peligro con sus contragolpes.
Fue en el minuto 11 cuando Letexier, teóricamente el mejor árbitro del mundo, sancionó un penalti a favor del Arsenal en el área del Real Madrid, con dos minutos de retraso. El VAR le notificó y consideró como penalti un agarrón de Asencio sobre Mikel Merino.
San Courtois salvó la situación al detener el tiro de Saka. Y el Bernabéu estalló en vítores. Fue como si se tratara del primer gol de una remontada.
El Madrid no terminó de involucrarse en el partido hasta que, en el minuto 22, el árbitro sancionó un penalti por un agarrón de Rice a Mbappé. Sin embargo, la revisión del VAR, que tomó 5 minutos, anuló la decisión arbitral.
El Real Madrid perdió el control. Se desperdició mucho tiempo, y le costó retomar el ritmo del juego.
Los ataques eran desarticulados y no lograban inquietar a David Raya. Mientras tanto, el Arsenal continuaba generando ocasiones de peligro con sus rápidos contragolpes.
El encuentro concluyó en el primer tiempo con un empate a cero, limitando la emoción a los últimos 45 minutos. En su trayecto hacia el vestuario, Carvajal tuvo un intercambio verbal con Saka.
Todos los presentes en el Bernabéu estaban convencidos de que el Real Madrid saldría a atacar en la segunda mitad con la intención de revertir la situación. Sin embargo, no ocurrió de esta manera. El partido se descontroló, convirtiéndose en un intercambio constante de ataques, y el Madrid nunca logró sentirse en su zona de confort.
Saka abrió el marcador con un gol que puso el tanteador en 0-1, pero poco después Vinícius logró igualar al aprovechar un error de Saliba. No obstante, no se registrarían más goles a favor del Madrid. Solo Martinelli se encargó de alterar el resultado, finalizando en 1-2 durante el tiempo añadido.
Arsenal 5, Real Madrid 1. No es la forma más adecuada de caer y ceder el cetro. Ancelotti es consciente de ello, y sabe que su etapa en el Bernabéu ha llegado a su fin.
Al término del partido, MB pudo enterarse de que Ancelotti completará LaLiga y dirigirá la final de la Copa del Rey, pero no participará en el Mundial de Clubes. Florentino le permitirá desligarse para que comience su labor con Brasil.
Un período de grandeza llega a su conclusión. Junto a Ancelotti se despedirán Modric, Lucas Vázquez, Alaba y Tchouaméni.